LA COMUNICACIÓN QUE SURGE DEL CORAZÓN
La próxima palabra que digas puede cambiar tu vida. ¿Contundente, verdad?
Lo sorprendente es que ¡es cierto!
Las palabras que usamos determinan cómo son nuestras relaciones: con nosotras mismas y con los demás. Y de la calidad de esas relaciones, depende, al final, cómo nos sentimos en la vida. ¿Lo ves?
La mayoría estamos familiarizados, porque así nos educan, con un lenguaje que fomenta las etiquetas, las comparaciones, las exigencias, los juicios…Pero clasificar y juzgar a las personas, tanto a nosotras mismas como a los demás, promueve la agresividad.
Cuando nos expresamos de esta manera, aumenta la actitud defensiva y la resistencia de las personas a las que nos dirigimos. Y si usamos este tono con nosotras mismas, lo mismo. Nos cerramos, nos limitamos, en lugar de la apertura y la confianza que suscita la compasión.
Estoy leyendo un libro sobre la “comunicación no violenta”, de Marshall B. Rosenberg . Es absolutamente fascinante. Me está gustando tanto que he decidido compartir con vosotras algunas de sus enseñanzas, como en este caso.
¿Y qué es una comunicación no violenta? – te estarás preguntando. Su creador dice que la comunicación no violenta o comunicación compasiva es aquella que surge del corazón. Supone expresar desde el corazón y escuchar también desde él.
¿Y cómo se logra esto?
Se consigue centrando nuestra atención en lo que sentimos y necesitamos –cuando somos nosotras quienes nos expresamos– , y en lo que sienten y necesitan los demás –cuando escuchamos a otros– , en lugar de concentrarnos en clasificar, analizar y buscar errores.
Te recomiendo que te observes en tu modo de expresarte y de escuchar. Yo ya lo estoy haciendo. Te darás cuenta de que no solemos practicar lo que recomienda la comunicación no violenta (CNV) y comprenderás, como me está pasando a mí, las muchas veces que hacemos daño con las palabras, a los demás y a nosotras mismas.
Cuando te sorprendas expresándote de una forma no compasiva, dale la vuelta y crea una expresión que tenga en cuenta tus sentimientos y tus necesidades, sin culpar ni juzgar al otro. Responsabilízate de lo que sientes y de lo que necesitas, y no eches balones fuera, arrojando la responsabilidad de lo que sientes y necesitas a otros.
Cuando practicamos esta comunicación honesta y franca con nuestros sentimientos y necesidades estamos buscando donde sí es posible encontrar. El estilo violento, sin embargo, supone buscar en lugar equivocado.
• Los cuatro elementos de la comunicación no violenta.-
La CNV, como dice su creador, nos sirve de orientación para reestructurar el modo en que nos expresamos y escuchamos a los demás. Es un cambio de conciencia profundo. Para ello, debemos centrarnos en cuatro elementos:
1.- Lo que observamos. (OBSERVACIÓN).- Observar lo que es, sin juicios ni etiquetas. Remitirnos a los hechos escuetos y concretos que observamos en ese contexto y expresarlos.
2.- Lo que sentimos. (SENTIMIENTOS).- Expresar cómo nos sentimos con franqueza y honestidad ante esos hechos que hemos observado y que acabamos de expresar.
3.- Lo que necesitamos. (NECESIDADES).- Detrás de cada uno de nuestros sentimientos hay una necesidad. Es necesario vincular lo que sentimos con la necesidad que hay detrás y que, a menudo, no tenemos satisfecha. Recuerda siempre que lo que afecta a tu bienestar no lo causan los demás. Los demás son un estímulo. La causa está en ti y es una necesidad no satisfecha. Esto es importantísimo. Busca siempre cuál es esa necesidad no satisfecha que hay en ti.
4.- Lo que pedimos para enriquecer nuestra vida. (PETICIONES).- Una vez que hemos observado lo ocurrido, que hemos expresado cómo nos sentimos y lo que necesitamos, pedimos lo que nos ayudaría a enriquecer nuestra vida. Pedimos, no exigimos. Son cosas diferentes.
• ¿Quieres un ejemplo de lo que es comunicación compasiva o comunicación no violenta (CNV)?
Empezaremos con un ejemplo que NO es CNV.
Imagina que en una pareja ella le dice a él: “El problema contigo es que eres demasiado egoísta”.
Con este planteamiento, él sentirá que está recibiendo una crítica, se pondrá a la defensiva y ella no verá satisfecha su necesidad.
Si ella, sin embargo, usa la CNV y pone la atención en sus cuatro elementos, podría decir:
“Las 3 tardes que tienes libre entre semana las dedicas a hacer deporte. Yo me siento triste y sola porque necesito de tu compañía. Me gustaría que una de esas tardes la compartiéramos y la pasásemos juntos.”
En este ejemplo están presentes los cuatro elementos de la CNV:
1.- OBSERVACIÓN sin juicio.- “Las 3 tardes que tienes libre entre semana las dedicas a hacer deporte”
2.- SENTIMIENTO.- “…Yo me siento triste y sola…” Asume la responsabilidad de cómo se siente.
3.- NECESIDAD.- “…necesito de tu compañía”. Detrás de cada sentimiento hay una necesidad.
4.- PETICIÓN, sin exigir.- “Me gustaría que una de esas tardes la compartiéramos y la pasásemos juntos.”
Ya sé que no es sencillo porque no nos han enseñado a expresarnos de este modo y nos sentimos vulnerables cuando abrimos el corazón. Pero es la única manera en que encontrarás lo que buscas y la comunicación será más verdadera y humana.
Requiere dedicación y entrega, sobre todo al principio. Yo lo estoy practicando sobre el cuaderno, escribiendo cada vez que quiero reestructurar el modo de expresarme y conseguir una comunicación desde el respeto y la compasión. Te invito a que tú también lo hagas.
La comunicación desde el corazón trae profundidad y conciencia a nuestra vida.
Ya sabes que en Palabras a la Vida creemos firmemente en el poder de las palabras. Si quieres descubrir cada vez más ese poder, te invito a que, si aún no lo has hecho, te suscribas a nuestro blog rellenando el formulario de aquí abajo.
Nuestras propuestas creativas para que tus palabras cuenten en tu evolución personal están en la Escuela de escritura personal de Palabras a la Vida. Si la visitas, te llevarás otro regalo.
Noemi dice
Garbi!!! Tu si que eres todo corazon!!! Por cierto espero este mejor!!! Gracias!!! Un texto muy enriquecedor!!!
Palabras a la Vida dice
¡¡¡ Noemí, guapa !!! Muchas gracias por tus palabras y por tu aprecio 🙂 Mi corazón se va encontrando más fuerte.
Me alegra mucho que te hayas interesado por la comunicación desde la empatía y el respeto.
Para mí tú también eres un hermoso corazón ♥
¡¡ Un abrazo grande !!
Maria Selles Sorli dice
Hola, me encanta es importante cambiar la comunicación con los demás siendo de forma más asertiva para conseguir estar más a gusto conmigo y con el resto de las personas. Gracias me encanta todo lo que aprendo.
Palabras a la Vida dice
Muchas gracias, María, por tus palabras 🙂
Es cierto; comunicarnos de la manera en que queremos es un camino para estar más a gusto con nosotras mismas y con las demás personas. Me encanta este enfoque. Muchas gracias por compartirlo en este rincón. Y muchas gracias también por tus ganas de aprender 🙂 Son un estímulo. ¡¡ Un abrazo grande !!
Montse PG dice
Gracias por este post😉
Desde pequeñas a mis hijas siempre les he dicho: «Con respeto y educación puedes decir todo lo que tengas en tu corazón. No importa quien sea, profesor, directora, aita, ama, aitite….solo necesitas respeto y educación para expresar lo que siente tu corazón» 😍
Palabras a la Vida dice
¡¡ Oh, Montse, es precioso !!
Muchas gracias por tu lección, compartida con tus hijas y con todas nosotras. ¡Es genial!
Respeto, educación y corazón; tres magníficos ingredientes para lograr la comunicación más sana y más bella. ¡Me encanta!
¡¡ Un abrazo grande !!
Jose María dice
Muchas gracias, Garbi! Me ha encantado el artículo. Sobre todo el ejemplo que has puesto. ¡Qué clarificador! Me ha recordado a un curso que hice sobre inteligencia emocional, en el que hablaban de la comunicación asertiva y los elementos de la comunicación eran muy parecidos. Siempre intentando ser lo más certero posible con las palabras, porque tienen mucho poder en uno mismo y en los demás, como bien dices. Voy a conseguir el libro que compartes, no lo conocía, y será de mis próximas lecturas. Y de paso, voy a compartir tu artículo con la comunidad de diariodeagradecimientos.com. Creo que es un Gran Regalo para trabajarlo. Un fuerte abrazo! Siempre tan certera con lo que compartes. 😍
Palabras a la Vida dice
¡¡ Hola, José María !!
Muchísimas gracias por tus palabras y por compartir el post en la comunidad de diariodeagradecimientos.com 🙂
El libro te va a encantar. ¡¡ Es fascinante !! Yo lo estoy leyendo muy lentamente para degustarlo, palabra a palabra, y para ¡aprender!
Tienes razón en el gran poder de las palabras, tan inmenso y, a veces, tan desconocido o tan poco tenido en cuenta. Es un maravilloso poder que toda persona tenemos y que, como dices, construye nuestra realidad íntima y repercute en las relaciones con los demás.
Adelante con tu maravillosa comunidad de diariodeagradecimientos.com
¡¡ Un abrazo grande !!
Gema Rodríguez landeras dice
Me ha encantado,lo intentaré
Palabras a la Vida dice
Muchas gracias, Gema, por tus palabras y por tus ganas de poner en práctica esta comunicación de cercanía 🙂
Simplemente intentarlo, es ya un cambio cualitativo importante. Yo, al menos, lo estoy experimentando ya así. Te sientes más a gusto con la calidad de tu comunicación, porque dices las cosas como quieres decirlas y si, en ocasiones, no se consigue, el reto sigue ahí, muy presente, para intentar aplicarlo la próxima vez. Es como un nuevo horizonte que hubiéramos pintado a nuestra manera de expresarnos. Está ahí para indicarnos el camino. ¡¡ Un abrazo grande !!
Isabel Garcia Garcia dice
Querida Garbi, gracias por tu invitación, acepto muy gustosa, la verdad es que quiero cambiar unas cuantas cosas que hacen que yo no me sienta cómoda con la forma de comunicarme. Ya tengo preparado el papel para tomar nota de las cosas que digo, y cómo las digo. He dibujado un corazón grande en la hoja, antes de empezar a escribir, para saber que todo lo que diga, escriba y practique a partir de ahora tiene que ser con el corazón. Me encanta este reto. Supone prestar atención cada día, cada momento, y eso me gusta. Gracias por estar ahí, y enseñarme los diferentes caminos que me llevan a mi, a ser yo… tal cual… como quiero ser. Abrazo fuerte!!!!.
Palabras a la Vida dice
¡¡ Oh, Isabel, tesoro !!
Me encanta esa idea de dibujar un corazón grande en la hoja de papel como símbolo de que todo lo que digas será desde el corazón. ¡¡ Es precioso !!
Muchas gracias por tu buen gusto y por tu sensibilidad.
A mí me pasa lo mismo que a ti. Tampoco estoy a gusto con mi forma de comunicarme en determinadas situaciones, sobre todo, cuando hiero con mis palabras. Y estoy descubriendo que la comunicación no violenta nos surte de herramientas para lograr una comunicación en la que expresarnos como de verdad queremos, desde el corazón.
Muchas gracias por tus palabras y por no cansarte de compartirlas en este rincón. No te puedes hacer idea de lo que agradezco tu presencia y tu compañía.
¡¡ Un abrazo enorme !!