TU TERRITORIO MÁGICO ES… ¡CASA! ¿CUÁNDO LO VISITASTE LA ÚLTIMA VEZ?
A veces, puede ser un lugar; en otras ocasiones, puede tratarse de una atmósfera, o un aroma, o un sonido…Incluso puede ser un recuerdo o algo que, de pronto, te hace cerrar los ojos y sonreír de una manera que solo tú sabes lo que significa.
Me refiero a todo aquello que te traslada a «tu territorio», a ese «lugar» emocional, y también espiritual, que sientes como tu bálsamo y tu refugio. Es ese espacio en el que estás a salvo, de una manera serena, con un brillo tranquilo, sin estridencias. Con la sensación de que el misterio de la vida es estupendo y experimentas gratitud por estar viva y humildad respecto al lugar que ocupas en el Universo.
¡Ay, ese maravilloso territorio!…Puede estar en cualquier parte, visible o invisible, pero, sobre todo, lo vives dentro de ti.
A veces, hay algo fuera que lo espolea o lo desencadena. Pueden ser esas circunstancias que te nombraba al principio. Cada persona respondemos a unos desencadenantes y a partir de ellos empezamos a sentir cómo se despliega nuestro «territorio mágico» en nuestro interior.
Una vez leí que las personas que tienen su propio universo se sienten, con más facilidad, felices. Conectar con tu «territorio mágico» es precisamente eso: tener tu propio universo. Y para mí, como te escribo, ese «territorio mágico» es más intangible, que tangible, más sensaciones que hechos, más cósmico que terreno, más interior que exterior. ¿Y el tuyo, cómo lo sientes?
A veces mi gatita Mía me invita a que la siga. Entonces, se mete en uno de sus refugios, bajo algún mueble y espera a que yo también pase. Permanezco acurrucada lo mejor que puedo y, en esa atmósfera, siento que Mia está en su «territorio mágico» porque lo veo en sus ojos. Entonces, ocurre que su «territorio mágico» activa el mío.
Es otra de las propiedades de los «territorios mágicos», que se activan unos a otros.
También tienen otra cualidad y es que, siendo tan sutiles como son, los pueden despertar las palabras. Hay palabras que funcionan como una llave y abren la puerta a tu «territorio mágico».
Servirse de las palabras como medio de locomoción para frecuentar esos territorios interiores es algo maravilloso. Si tienes el hábito de escribir para sentirte, para saber cómo estás y qué necesitas, sabes muy bien de qué estoy hablando.
También entiendo que puedas estar diciendo «sí, a mí me encantaría que las palabras me llevaran a mi territorio mágico y sentirme super a gustito en él, pero ¿cómo empiezo?«.
Para dar una respuesta a las mujeres que se hicieran esa pregunta creé «El Yoga de las palabras». El yoga nos permite salir del modo mente y reconectar con nosotras mismas.
Esa reconexión es la misma que se produce cuando nos vamos de visita a nuestro territorio mágico. Por eso elegí la palabra «yoga» en el título de esta herramienta. A «Yoga» le añadí «de las palabras» porque las palabras son un magnífico GPS en el camino hacia los territorios mágicos.
Son expertas rastreadoras del aroma de tu alma y es que los territorios mágicos –ésta es otra de sus cualidades– huelen a ti, a todo lo que te hace sentirte en tu hogar, desde que eras niña hasta ahora, y hasta siempre, porque estoy segura de que el aroma de alma nos acompaña siempre, estemos en el mundo que estemos.
En «El Yoga de las Palabras» aprendes a irte colando en tu territorio mágico jugando con las palabras. Mis preguntas y tus respuestas te permitirán frecuentar ese territorio, para ilusionarte, para renovarte, para volver a sentir tu brillo, con suavidad, con ternura, con armonía…En el territorio mágico no cabe lo estrepitoso.
¿Te apetece probarlo? Se me ha ocurrido algo que nunca antes te había ofrecido.
Te regalo el primer módulo del curso on line El Yoga de las Palabras para que comiences a dar los primeros pasos hacia tu territorio mágico.
Si, luego, te atrae el camino y te apetece seguir disfrutándolo hasta el final, en tu mano está ponerte en contacto conmigo para continuar. Quien visita su territorios mágico necesita volver una y otra vez. Es tu mejor bálsamo y tu mejor refugio, como te decía al principio.
Para recibir el primer módulo de regalo, escríbeme dicendo que lo quieres y dejando claro en el mensaje tu nombre y tu email, para que, de esta manera, te suscriba a Palabras a la Vida, si aún no lo estás. En mi respuesta te enviaré la contraseña para que te lo puedas descargar totalmente gratis.
Es una oportunidad que solo mantendré unos días para las mujeres que estéis en el camino de volver a casa, porque tu territorio es ¡casa! ¿Te acuerdas cuando lo gritábamos en los juegos de la infancia y nos sentíamos totalmente a salvo?
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