PRACTICA LA MUDA EMOCIONAL SI NO TE SIENTES EN TU PIEL
Tengo la sensación de que las personas también necesitamos mudas de «piel», lo mismo que las serpientes y otros animales, solo que en nuestro caso son mudas de «piel emocional».
Necesitamos desprendernos de nuestra piel emocional cuando se nos queda vieja, dejar en el camino ese «envoltorio» que nos aprieta y no nos deja crecer.
Es una «piel» formada por pensamientos que no nos sirven, por sentimientos que no nos ayudan a evolucionar, por ideas que no nos dejan ver otros horizontes más amplios, por hábitos de vida que nos boicotean… No sé si te haces una idea de a qué me refiero.
Tiene que ver con esa «piel» que ya no te encaja, que ya no te queda como un guante porque ya no es la de este momento vital en el que estás y necesitas que se te caiga.
Necesitas mirar para atrás y ver que se ha quedado ahí, en algún lugar del camino, integrándose, tal vez, en otra cosa, contribuyendo a que surja algo distinto.
También sé que en estas etapas de muda emocional nos solemos desesperar porque la vieja piel no se nos desprende tan rápido como quisiéramos. Pero en esto, como en todo en la vida, solo has de recordar que cada cosa tiene su momento. A veces debemos actuar y tomar una decisión para que esa piel se caiga y otras veces, solo hay que esperar a que las circunstancias se acomoden y se acabe desprendiendo sola.
¿Cuándo actuar y cuándo esperar? — te estarás preguntando — . Es sencillo: si tienes dudas, siempre has de esperar. Ya llegará el momento de agitarte con fuerza y con decisión para ver caer tu vieja piel.
A veces nos da vértigo despedirnos de una vieja piel, aunque nos «baile» y no se ajuste a nuestro ser. Y es que la hemos llevado tanto tiempo encima que llegamos a pensar que en ella está una parte de nuestra identidad. Algo así como «más vale lo viejo conocido…» Nos da miedo quedarnos desnudas.
Nos agarramos a la piel que no somos porque tememos el «vacío» de quedarnos sin ella. Pero el vacío siempre es necesario para que surja algo nuevo. En un jardín lleno de maleza es imposible sembrar nada; necesitamos limpiarlo para que en ese vacío prendan las nuevas semillas. No temas, por tanto, la desnudez de dejar atrás tu vieja piel.
También es cierto que la mente no nos lo pone fácil. Utilizará toda su batería de argucias para intentar convencerte de que «no es para tanto», de que «es una piel vieja, pero es la tuya y no te sienta tan mal», de que «quizá sea solo una mala temporada y luego todo volverá a encajar»…de que «casi todo lo que hay en esa piel te puede seguir haciendo feliz si cambias solo una pequeña cosa»… Excusas mil para que no hagas la muda porque a la mente no le gustan los cambios y ve la incertidumbre como una amenaza.
Sé de lo que te hablo y estoy descubriendo que la incertidumbre es una oportunidad para descubrir otra relación con ella, más fructífera. ¿Por qué temer lo que desconocemos si no sabemos lo que nos traerá? Temer es cerrar la puerta a todo, también a la magia, también a lo mejor que ni siquiera imaginamos.
Una actitud de dulce apertura enriquece en todo momento.
Cuando la mente recurra a sus artimañas para que tires la toalla y no lo intentes, escribe. Practica la escritura personal. Yo acabo de hacerlo hace un momento y me siento como nueva.
Vete al papel y escribe. A mí me gusta escribir a mano, con lápiz bien afilado y sobre las páginas de los cuadernos de Palabras a la Vida.
Escribe cómo te sientes, qué es lo que te duele y qué es lo que quieres cambiar o lograr. Escribe en primera persona y termina con una pregunta. Esa pregunta es la que le vas a lanzar a la sabia interior que habita dentro de ti.
Ahora empieza la segunda parte del ejercicio. Titúlala «La respuesta de mi sabia interior». Ponte en la piel de esa sabia interior que hay en ti y comienza a responder a las preguntas y planteamientos que has realizado en la primera parte del ejercicio.
Escucha esa voz sabia que es tierna y amorosa contigo, que sabe lo que importa en tu vida, que te conoce a fondo y que solo quiere ayudarte. Escúchala y vete escribiendo sus reflexiones.
Te sorprenderá la sabiduría de sus consejos. Te admirarás de la lucidez con que te habla y, cuando termine, te sentirás llena de paz y con ilusión para seguir sus pasos.
En cada una de nosotras hay una consejera sabia que está disponible para nosotras en el momento en que la necesitemos. No cierra nunca.
Ejercicios como éste están incluidos en el curso «Escríbete y Vivirás Mejor» de la Escuela on line de escritura personal de Palabras a la Vida. La escritura es una herramienta de autoconocimiento magnífica en todo momento, y muy especialmente, en periodos de muda emocional.
Si visitas la Escuela, podrás practicar, de regalo, el Mantramail, píldoras de sabiduría para entrenarte en la escucha de la sabia consejera que hay en ti.
Antes de terminar, quiero destacar lo que dice una de las cartas de la Baraja ZEN de Palabras a la Vida. Hace unas semanas me encontré con ella por «sorpresa» — ya sé que nada es casual –. Tengo la certeza de que ella me encontró a mí y no al revés. Desde entonces la tengo sobre la mesilla de noche para releerla cada vez que mi mirada se posa sobre ella.
¿Casual? No, pura magia. Es la que desatan las Barajas de la Felicidad. Esto es lo que dice:
El mejor modo de aprender y mejorar en la vida es no luchar contra las circunstancias. Observa la realidad y déjate impregnar por la MAGIA de las oportunidades.
Baraja ZEN de Palabras a la Vida
Otro mensaje propicio, como ves, para momentos de muda emocional.
Hoy te recomiendo…
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- También te recomiendo la Baraja ZEN de Palabras a la Vida. Barájala y que te sorprendan sus mensajes. Encontrarás ideas y puntos de vista distintos, que ya no te anclarán en lo que no quieres sino en lo que te favorece. Son sorbitos de conciencia para ser feliz aquí, ahora y como ya eres.
Isabel Garcia Garcia dice
Es curioso, como a medida que voy cumpliendo años, veo como van llegando esos momentos en los que hay que dejar atrás esa piel que me tiene prisionera y aprieta, y aunque al principio me siento rara e insegura con la piel nueva, siempre me doy una oportunidad (o dos) para saber que siento con la piel nueva. El último cambio de piel me ha sentado perfectamente. Te estoy muy agradecida querida Garbi por escribir estas palabras tan maravillosas, y que habitualmente las sentimos pero no nos atrevemos a ponerles nombre. Abrazo gigante.
Palabras a la Vida dice
Mi querida Isabel, ¡qué bonito es lo que cuentas siempre!
Muchas gracias por expresarlo de esa manera tan hermosa 🙂
No sabes cómo me alegra que tu último cambio de piel te haya sentado tan bien. ¡¡ Eso es genial !! Me siento muy identificada con eso que dices de que con la edad se hace más patente la necesidad de mudar la piel; es cierto, se siente de una manera más clara que ha llegado el momento 🙂
Me encanta cuando dices que siempre te das «una o dos» oportunidades para saber cómo te sientes con la piel nueva –ja,ja,ja–
Cuando estrene piel y, al principio, me sienta incómoda o insegura, me acordaré de ti y de tus oportunidades, y sonreiré.
Yo también te estoy muy agradecida. Por ser como eres 🙂
¡¡ Otro abrazo gigante !!