¡Hola, valientes¡ Cuando agradeces algo es como si volviera a suceder. Por eso hoy quiero dar las gracias a Mónica, por dejarse la piel en cada charla, como la de ayer. Me imagino que pronto la colgará en su web. ¡No os la perdáis¡
Con la coach y escritora Mònica Fusté he aprendido que la felicidad está en nosotros y que aquí, ahora y con lo que ya eres puedes ser feliz. Sólo has de decidirlo ¡ya¡
Las mejores sonrisas empiezan en el alma, se dibujan en los labios y, luego, saltan de boca en boca porque contagian. Como la sonrisa de Mònica Fusté.
Hasta sus palabras sonríen, y saltan, bailan, estiran los brazos. Como nos dijo ayer en un webinar gratuito -webinar es un seminario en línea-, «si mueves el cuerpo, moverás tus emociones y tendrás vitalidad». Ésa es la energía para cualquier cambio que elijamos.
Mònica es valentía. Por eso me conmueve cada vez que intenta animarnos con sus palabras:
Todos somos valientes y cobardes -nos insiste- Depende del momento y en qué nos enfoquemos.
Sal de lo conocido, te será incómodo, pero te compensará millones de veces.
Funciona, os lo aseguro, No es teoría.
No, no es teoría porque sé que un día la valentía quiso probar a ser mujer y eligió a Mònica Fusté. Cada charla nos regala su canción y los pasos que aprende en su baile con la vida.
A cada cual nos resuena una nota porque con Mònica ocurre, al menos a mí, que dice lo que estabas esperando y no lo sabías.«No hagas caso de la mente, es un caballo. Si no lo domas, te destrozará».
Entonces Mònica saca las notas de su experiencia vital y delata a ese caballo indómito.
«Desmóntalo cuando te diga que seas fuerte. El ser humano es todo: fuerte y vulnerable. Si sólo queremos ser fuertes, nos estaremos machacando».
«No le hagas caso cuando te ordene «date prisa». No tiene sentido: sólo existe el ahora. Además, no vamos a cambiar el ritmo natural de cómo funciona todo» .
Lo que más me gusta es que nos permite identificar al enemigo y volverle amigo: con sus recetas.
Enfócate en lo que haces bien, en tus talentos, en tus éxitos diarios. ¿Cómo? Agradece, y así lo recrearás aún más.
Empieza a interpretar lo que te sucede de forma positiva. Si te centras sólo en lo negativo, tu percepción no es la completa. ¡Cambia el marco a tu experiencia¡
El lienzo de Mònica es la generosidad y de su marco me encanta la inocencia. Una mirada limpia, que siente nuevo cada instante, como una oportunidad de volver a empezar.
Como en la niñez. La lleva puesta en la piel y, cuando escucho su voz, es como si viniera a buscarme y me invitara a descubrir tesoros. Lo fascinante es que ¡me permite encontrarlos¡